e ilumine levemente la habitación, permitiendo que te vea a mi lado,
mirándome con esos ojos tan bonitos tuyos.
Acaricio tu mejilla con la yema de mis dedos y subo para hundir mis dedos en tu pelo.
Me miras, te miro. Respiras, te respiro.
Te acercas a mí lentamente y mientras, puedo perderme en tu aroma,
tu acaricias mi espalda, haciendo que el mas grande de los escalofríos se abra paso en mi piel.
Tus labios rozan los míos, mientras mi corazón late a tres mil por segundo,
me pregunto si tu sentirás lo mismo.
E imaginando la respuesta a la pregunta que he dejado en el aire,
me pierdo entre tus besos, tus caricias, todo de ti.
Porque podría perderme en tu cuerpo mil veces
y no me importaría no encontrar el camino de vuelta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario